Banco del Bienestar alcanzó un importante hito con la operación de 2,750 sucursales en México, según se informó en la conferencia matutina del 5 de julio. Todas las sucursales fueron construidas por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), con una inversión de 15 mil millones de pesos. Este avance fue reportado por Víctor Manuel Lamoyi Bocanegra, director del banco, quien destacó que la red total de sucursales asciende a 3,149, superando en mil a su competidor más cercano, Banco Azteca.
Lamoyi Bocanegra informó que se han entregado tarjetas a 26 millones 514 mil 762 beneficiarios de los programas sociales, asegurando pagos puntuales. Las sucursales del Banco del Bienestar llegan a 2,639 localidades y 1,962 municipios en las 32 entidades federativas, alcanzando lugares donde la banca comercial no tiene presencia.
Andrés Manuel López Obrador explicó el contexto histórico y la razón de ser del Banco del Bienestar. Recordó, en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari se vendieron 12 bancos a particulares sin experiencia en el sector, lo que culminó en el rescate financiero del FOBAPROA bajo la administración de Ernesto Zedillo.
Ante esta situación, cuando su administración tomó posesión, encontraron que Bansefi, el banco existente, carecía de la estructura necesaria. Por ello, decidieron establecer el Banco del Bienestar para manejar la dispersión de los apoyos de los programas sociales de manera directa y sin intermediarios. Esto asegura que los beneficiarios reciban los apoyos sin comisiones, una iniciativa la cual fortalece la transparencia y eficiencia en la entrega de recursos.
La red de sucursales del Banco del Bienestar permite una mayor cobertura geográfica, así como un acceso más equitativo a los servicios financieros. Esto es particularmente significativo en áreas rurales y marginadas, donde la banca comercial no llega. La inversión en cada sucursal ha sido aproximadamente de 6 millones de pesos, lo que refleja el compromiso del gobierno con la inclusión financiera.
El desarrollo del Banco del Bienestar ha sido un proceso cuidadosamente planificado y ejecutado para asegurar que los recursos lleguen directamente a los beneficiarios. “La dispersión de los apoyos se hace sin intermediarios, directamente a los beneficiarios, sin comisiones”, afirmó el presidente López Obrador.
NotiPress/Patricia Manero