Ante el inicio de la temporada de calor, el incremento de las temperaturas propicia la reproducción de insectos ponzoñosos tales como alacranes, y con ello la probabilidad de picaduras de estos.
Al cierre de febrero del año en curso, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro ha registrado un total de 371 casos de atención de pacientes por picadura de alacrán.
Por ello, el IMSS en Querétaro hace un llamado de advertencia que, ante la picadura de estos insectos, eviten automedicarse y acudan a recibir atención médica para una valoración clínica adecuada.
Ricardo Ramón Andrade Pedraza, médico urgenciólogo adscrito al Hospital General Regional (HGR) No. 1, explicó que existen tres grados de intoxicación por el veneno de alacrán y cada uno de estos tiene síntomas diferentes.
“Las picaduras de alacrán y sus grados de intoxicación se dividen en tres: leve, moderada y severa, los síntomas pueden aparecer de forma inmediata o dentro de una a seis horas; sin embargo, la recomendación es acudir a atención médica para su valoración y tratamiento oportuno”, expresó.
En un caso de intoxicación leve, los síntomas son dolor en la zona y adormecimiento local, comezón o inflamación en área afectada, hormigueo local e inquietud leve.
En casos moderados se presenta enrojecimiento en la zona donde fue la picadura, dolor de cabeza, comezón en nariz, boca y garganta, sensación de cuerpo extraño en la faringe, dificultad para tragar, entre otros.
Sin embargo, los síntomas que alertan de una atención médica inmediata son dificultad respiratoria, adormecimiento de brazos, piernas y cara, hipersecreción salival, movimientos involuntarios de globos oculares, contractura muscular, entre otros.
De presentarse una picadura por alacrán, es necesario acudir a su unidad médica más cercana para recibir Antídoto Faboterápico antialacrán.
El especialista indicó que se debe tener extremo cuidado y precaución en bebés, niños y adultos mayores, ya que son grupos vulnerables que podrían desarrollar complicaciones si no se es atendido oportunamente.
Andrade Pedraza sugirió extremar precauciones en la limpieza de habitaciones y patios, evitar almacenar escombros, ladrillos, tejas, leña y madera, entre otros objetos que generen humedad y puedan servir de refugio para este tipo de insectos.