El 46 por ciento de las culturas en el mundo, practican el beso de forma apasionada o romántica con su pareja, de acuerdo con un estudio publicado en la revista American Anthropologist. En ese sentido, un beso es un modo de expresar amor, pasión o interés por una persona, por ello, el 6 de julio se celebra el Día Internacional del Beso Robado.
Desde el siglo XIX se ha celebrado el Día del Beso Robado en Gran Bretaña, de acuerdo con la plataforma díainternacionalde.com, sin embargo, actualmente se ha popularizado a nivel mundial. Esta celebración no se debe confundir con el Día Internacional del Beso, el cual es celebrado cada 13 de abril.
Muchas personas utilizan este día como una excusa para tomar valor y plantarle un beso a la persona que desean, pero no han tenido el coraje de hacerlo. No obstante, es importante hacerlo con el consentimiento de la persona para no incomodarla o violentarla.
Algunos estudios señalan que besar es un acto presente en la naturaleza, pues dicho comportamiento se ha observado tanto en aves como en simios. Incluso, se dice que algunas aves chocan sus picos como una señal de amor, por su parte los primates usan los besos para relajarse y reconciliarse.
Los humanos, en otro sentido, se besan como consecuencia de la evolución, pues los primates juntan sus labios con sus crías para darles alimentos. Sin embargo, los filematólogos creen que los besos no solo fueron un medio de supervivencia, sino una forma de promover el vínculo social y como una expresión de amor.
Además, besar permite recabar información sobre la pareja, pues al unir los labios y colocar la nariz pegada a la otra, se puede detectar información genética de la pareja. De esa manera, se puede conocer si esa persona es diferente y si tiene genes adecuados para reproducirse, según un artículo especializado de la revista More.
Sin embargo, no solamente es una práctica evolutiva, sino también aprendida. Y es que, más de la mitad de las culturas en el mundo no se besan de manera pasional o romántica con su pareja, según el estudio publicado en la revista American Anthropologist. Además, un descubrimiento del estudio apuntó la existencia de una fuerte correlación entre la frecuencia del beso romántico-sexual y la complejidad social relativa de una sociedad. Es decir, cuanto más compleja socialmente es la cultura, mayor es la frecuencia de los besos romántico-sexuales.
De acuerdo con el estudio, para el resto de las culturas besar es una práctica altamente desagradable, especialmente para las tribus cazadoras y recolectoras. Otra teoría señala que el beso fue creado por la cultura occidental, por lo cual solo personas de dicha región se besan para demostrar afecto o amor.
NotiPress/Fernanda Martínez