Tal vez ya te acostumbraste al uso de las parrillas de gas, porque te has familiarizado con su uso y su funcionamiento. Sin embargo, no puedes pasar por alto que se han creado nuevas opciones de cocción, como las parrillas de inducción, que prometen mucho. Para que no sientas que te estás perdiendo de algo al elegir, es bueno comparar antes las dos alternativas para decidir.
Parrillas de gas
Las típicas estufas o cocinas de gas han demostrado ser útiles durante mucho tiempo. Conectadas a la línea del gas, hay parrillas de gas de 4 a 6 quemadores que ofrecen bastante espacio para cocinar. En ellas puedes ver la llama salir y aumentarla o disminuirla, según la comida que estés preparando. Ahora bien, ¿qué tan rentables, seguras, cómodas y eficientes son estas parrillas?
Rentabilidad
Si en el lugar donde vives hay una línea para el gas, esta es la opción más rentable. Eso se debe a que el costo de las parrillas de gas es más bajo, en comparación con las de inducción. Además, su diseño simple evita que sea necesario reemplazarle piezas y permite el uso de toda clase de utensilios.
Seguridad
El riesgo con esta clase de estufas es mayor, porque la llama del fuego podría provocarte quemaduras graves. Aún peor, la posibilidad de que exista una fuga en la línea del gas conllevaría a un peligroso incendio. Si las perillas son de mala calidad, una cantidad pequeña de gas sale del área y podría generar un impacto con una chispa.
Comodidad
Probablemente la comodidad al cocinar en una parrilla de gas sea mayor, porque ya la has usado antes. Estas funcionan independientemente de que haya o no servicio eléctrico, contrario a las de inducción que dependen de él. Aparte, trabajan bien con utensilios de distintos tamaños en cada quemador, y te dejan ver la llama para que la gradúes.
Eficiencia
Debido a que los alimentos en estas estufas reciben entre el 40% y 55% de calor, tardan más en estar listos. En este aspecto de eficiencia y rapidez, las parrillas de inducción superan a las de gas. Sin embargo, su consumo energético hace que las facturas de electricidad sean mayores de lo que serían las facturas del gas.
Parrillas de inducción
Funcionan con voltaje entre 220 V a 240 V y solo calientan la base de los utensilios especiales. Esto lo hacen automáticamente después de que son colocados, gracias a la electricidad generada por el magnetismo. Por eso, constituyen una forma de cocción novedosa y bastante práctica, pero ¿son mejores que las parrillas de gas?
Rentabilidad
En caso de que en tu hogar no haya línea del gas, saldrá más económico hacer la configuración de la electricidad. Pero si hay esa línea, una estufa de inducción saldrá más costosa en varios sentidos.
Primero porque su precio es mayor, y segundo porque funciona con utensilios especiales que deberás comprar. Además, es probable que una de sus piezas se dañe y debas pagar para reemplazarla.
Seguridad
Como no emiten una flama, y no generan calor si no hay un utensilio en inducción, son más seguras. Algunas solo tardan unos segundos en enfriarse una vez que se dejan de usar, lo cual es muy bueno. De ese modo, vas prevenir muchos accidentes.
Comodidad
Por la misma ausencia del fuego, será más cómodo usar una estufa de inducción, pues tu cocina estará más fresca. Seguro valoras eso si vives en una zona calurosa o donde se da el verano. Por otra parte, evitarás el CO2 que generan las llamas y tendrás un control más exacto de la temperatura. Sin embargo, con esta no podrás cocinar si hay cortes de energía.
Eficiencia
Al proporcionar hasta un 90% de calor a los alimentos que se cocinan en ella, resulta más eficiente y rápida. Esa velocidad se ha revelado mediante pruebas que comparan una parrilla de inducción con una de gas. Pero en términos de energía estos modelos son menos eficiente, pues consumen más que los otros.
¿Cuál elegir?
La decisión correcta va a depender de las circunstancias de tu casa o apartamento, y tus preferencias. Claro está, también es necesario que tengas en cuenta tu presupuesto. Sea cual sea la que elijas, la hallarás en avera.mx.
