El secretario de Salud federal, David Kershenobich, advirtió sobre los riesgos del consumo excesivo de azúcar desde la infancia, al señalar que esta práctica está directamente relacionada con el desarrollo de obesidad, sobrepeso, diabetes tipo 2 y caries dental.
Durante la conferencia “Las mañaneras del pueblo”, encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el funcionario explicó que el azúcar activa procesos biológicos como la liberación de dopamina, generando una adicción desde edades tempranas. “Si logramos influir en que no desarrollen esa tolerancia y adicción al azúcar, sería la mejor manera de prevenir el desarrollo de obesidad, diabetes y caries dental”, expresó.
Según datos de la Secretaría de Salud, el 39 % de niñas y niños en escuelas públicas presentan sobrepeso u obesidad, y el 59 % tiene caries dental. Estos problemas están relacionados con el consumo de azúcares simples o calorías vacías, especialmente en alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas, a diferencia del azúcar natural presente en frutas, que aporta fibra, vitaminas y antioxidantes.
Kershenobich también destacó que la publicidad, el olor y sabor de los productos procesados promueven su ingesta excesiva y alteran la microbiota intestinal, lo que potencia el deseo por más azúcar.
Como respuesta, el Gobierno de México puso en marcha la estrategia nacional Vive saludable, vive feliz, para atender a 12 millones de estudiantes de más de 90 mil primarias públicas, la cual incluye aplicación de flúor dental cada seis meses y la prohibición de venta de comida chatarra y bebidas azucaradas en escuelas, vigente desde el 29 de marzo.
