México está pasando su tercera ola de calor, registrando temperaturas máximas de hasta 45 grados. De acuerdo con las autoridades meteorológicas, estas condiciones prevalecerán hasta el mes de julio de 2023.
El territorio mexicano no es la única región que está experimentando altas temperaturas. El Noreste de Europa también ha experimentado un verano caluroso, al incrementar al doble en la tasa de promedio de calentamiento, según un estudio de la Universidad de Oxford.
La diferencia de tendencias es pronunciada en Inglaterra, Gales y el norte de Francia, algo que preocupa a los expertos. El doctor Matthew Patterson, del departamento de Física de Oxford, señaló que las olas de calor, como la vivida en Reino Unido el verano de 2022, se volverán más regulares.
Aunque la temperatura máxima varía ente años, hay una tendencia de que los días de verano se calienten de manera más acelerada. En Inglaterra y Gales, por ejemplo, el día medio de verano aumentó aproximadamente 0.26ºC por década, por su parte el día más caluroso aumento 0.58ºC por década.
Si bien, no se comprende la causa de este calentamiento, el doctor Patterson señala que puede deberse al aire caliente transportado hacia el norte desde España. El país vasco se está calentando más rápido que el noreste de Europa, ocasionado el transporte de aire más extremo en relación con el aire ambiente en el resto de la región.
Ciudades de Centroamérica y el Caribe también han registrado altas temperaturas en las últimas semanas. En San Juan, Puerto Rico, las autoridades emitieron una alerta de calor excesivo por las altas temperaturas, las cuales junto a la humedad y tiempo generan una sensación térmica de más de 40ºC.
No obstante que el cambio climático es uno de los motivos por los cuales el hemisferio norte está siendo abatido por una ola de calor, este se debe de a un fenómeno conocido como domo de calor. Este domo se forma en un área de alta presión atmosférica y cuando el aire caliente es empujado hacia abajo, queda atrapado en un solo lugar. Es eso lo que provoca los disparos en las temperaturas de la región.
Los científicos consideran que estos eventos son provocados por un cambio brusco en las temperaturas del océano. El agua llega a calentar el aire y los vientos empujan ese calor hacia aquellos que se encuentran en la tierra, queden atrapados por un sistema de alta presión.
NotiPress/Fernanda Martínez