Corren los tiempos pre, pre-electorales, ¿qué pasa en México y en Querétaro?, aquí los comentarios de los editores de los medios electrónicos que van con el pulso ciudadano, feliz domingo a nuestros lectores.
Los “Consentidos” ya muy adelantados
Al parecer, el ejemplo nacional de arrancar la carrera electoral de manera anticipada… ha sido adoptado por QUERÉTARO, ya que desde hace meses podemos ver espectaculares, publicidad en radio y televisión, además de videos en redes sociales de los aspirantes más allegados al Ejecutivo Estatal.
En este sentido el gobernador KURI se ha pronunciado por mantenserse respetuoso de las actividades que realizan sus “trabajadores”, siempre y cuando no interfiera en su trabajo cotidiano.
Aunque los tiempos parecen adelantados y los aspirantes son muchos… al parecer las cartas ya están definidas y los “consentidos” ya van muy adelantados… sin embargo no se descartan las sorpresas que a partir del mes de julio empezarán a darse…
Ya que la unidad en el partido predominante de QUERÉTARO puede verse perturbada, por los intereses de algunos que han probado las mieles del poder y ya no quieren abandonarlas…
La carrera ya inició y ahora veremos si los que arrancaron antes, tendrán lo que se requiere para mantener el paso y llegar a la línea de salida del 2024…
SÓLO UNA OPINIÓN
Salvador Castillo
CEBOLLAZOS
“Haría muy mal en tener una mala relación para poder llamar la atención, los reflectores o el aplauso fácil”, declaró el gobernador Mauricio Kuri al ser cuestionado sobre los elogios que recibió del presidente Andrés Manuel López Obrador.
No como Senador, pero sí como gobernador, Mauricio ha mantenido una “buena relación” con el presidente. Cada uno, en su oportunidad, ha hablado bien del otro. Mantienen la cordialidad y las cosas en paz. Difícil que el presidente de la polarización emita un comentario positivo de algún político o gobernador, más difícil aun que estos comentarios los haga a un gobernador panista.
Las ‘buenas migas’ entre el gobernador panista y el presidente morenista han hecho pensar a los especialistas del análisis concienzudo entre tazas de café, que puede existir un acuerdo político-electoral donde el mandatario panista mantiene a Morena al margen con el aval del presidente que ha cedido el territorio para las intenciones electorales de su movimiento. No sería algo descabellado, pero tampoco algo concreto.
Lo que sí es cierto, es que pese a los halagos y los ‘cebollazos’, el Gobierno federal le sigue dando atole con el dedo a los queretanos. Dejando de lado los recortes al presupuesto y diversos apoyos al estado, enfocándonos únicamente en los proyectos como el Acueducto III, no hay nada firme, solo buenas intenciones. Y con un año de López Obrador en el poder, seguramente las peticiones de Querétaro no figurarán en su plan de retiro y el proceso electoral del 2024 que mantendrán muy ocupado al residente de Palacio Nacional.
Puede que el Acueducto III sea una de esas tantas obras que se heredarán a la próxima administración y López se lavará las manos.
Por otro lado, los detractores de Kuri, esos que sin descanso alaban al mesías ‘cuatroteísta’ se quedaron callados al ver cómo su mandamás solo tenía halagos para el gobernado que aquí desprecian y critican. Recuerden que en Morena la voluntad del pueblo es lo que diga el ‘dedito’ del hoy presidente.
Por cierto, las primeras ‘corcholatas’ llegaron a Querétaro para demostrar que en la entidad sí hay presencia morenista y el partido guinda tiene potencial para sorprender en las elecciones del próximo año.
Pese a que muchos panistas acusan a las ‘corcholatas’ de violar la ley electoral, varios blanquiazules aplican exactamente el mismo método. Los hay del tipo fritanguero, que pasan más tiempo recorriendo tianguis, mercados y puestos de tacos para hacerse de la empatía del elector en lugar de enfocarse en su trabajo; los hay, los que buscan la aprobación de su jefe político para destacarse con elogios a su mentor aunque ni ellos mismos se crean sus dichos; y por supuesto, los que aparecen en espectaculares, lonas y bardas, y esconden la mano justificándose que no fue obra de ellos. Lo peor, es que hay quien en verdad les cree.
Estamos en tiempos de campañas adelantadas, ante la tolerante mirada del árbitro electoral, donde los elogios, cebollazos, halagos y lisonjería serán parte del discurso de los que buscan la popularidad que les califique con el “peso político” para aparecer en la boleta. Y es que, como hemos visto en cada elección, no siempre gana el mejor, ni el más capacitado, gana el que más porra traiga.