Es un episodio triste, ¡sí!, ver que puede más la polarización y el encono que la educación, el respeto y, en este caso, la forma y el fondo político; esto durante la reciente visita que realizó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en su gira de despedida, donde es acompañado por quien será la primera presidenta de México, aún presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo; donde se abucheó al gobernador Mauricio Kuri por su ideología y filia política, más no por sus resultados, por más que así lo quieran hacer creer.
Fue de tal desagrado la situación, que la misma Sheinbaum Pardo pidió respeto a los asistentes y fue respaldada por AMLO; pues cómo señaló, la contienda llegó a su fin, es hora de construir para México y, por quienes vivimos aquí, para Querétaro.
Hay que saber ser ganador y saber ser perdedor; por más descalificaciones que puedan brindar unos a otros, la realidad es que a Kuri González aún le quedan 3 años al frente del Gobierno de Querétaro y que a Claudia Sheinbaum le vienen 6 años al mando del timón de México, por lo que la vía de la crítica recalcitrante no es la mejor opción.
El escenario que pinta en Querétaro, que siempre se ha caracterizado por tener una sociedad participativa, políticamente activa y sobre todo exigente, es que tanto las fuerzas políticas como la sociedad debemos aprender a fortalecer a nuestro estado en la suma de las coincidencias y diferencias.
Los resultados son claros, Querétaro ocupa los primeros lugares en los resultados financieros, de sustentabilidad, de justicia, seguridad, transparencia, ejercicio de recursos y calidad de vida; lo que muestra que el actuar del actual gobernador Kuri y su equipo de trabajo ha sido responsable y eficaz para llevar a la entidad a un excelente rumbo.
Del otro lado también el mensaje es claro, la ciudadanía, por voto mayoritario, le apostó a esa continuidad con cambio que planteó Shienbaum, a dar seguimiento a los proyectos que puso en marcha AMLO y a los que propone la presidenta electa, pues en ello ven un mejor futuro para el México que vivimos.
Ya no se trata de si nos gusta o estamos de acuerdo con el resultado, o no; el ejercicio de ser popular o ser amedrentador finalizó, es hora de sentarse a la mesa a discutir los temas que importan a unos y otros, seguridad, empleo, salud, bienestar, calidad de vida, salir de la pobreza, inclusión; es momento de negociar y tomar decisiones que dibujen un mejor paisaje para ese Querétaro que vivirán nuestros hijos.
Bien lo dijo el gobernador Mauricio Kuri en su intervención, cuando expreso su deseo para que la Doctora Sheinbaum tenga un gobierno exitoso y le aseguro que contará con el respaldo y apoyo de Querétaro para superar los desafíos y propulsar sus proyectos.
“Soy un convencido de que si a la presidenta le va bien, a la República le va mejor”, lo que yo estoy convencido debe aplicarse también para nuestro estado, pues si a Mauricio Kuri le va bien, a Querétaro le irá mejor.
